Desde la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza, (ASINMET), observamos que durante el año 2014, se profundizó el debate del sector energético en general, generando esto expectativas favorables en el mercado.
Las nuevas áreas petroleras licitadas en la provincia, la constante tarea de la mesa de diálogo minero y la adjudicación de las represas de Los Blancos, generaban esperanzas de trabajo y desarrollo en la región. Las inversiones de YPF y además Vaca Muerta, alentaban la incorporación de actores locales y de desarrollo de equipos y productos para sustituir importaciones. No obstante estas expectativas favorables, el correr del tiempo nos fue colmando de frustraciones.
Las inversiones en Vaca Muerta parecen no llegar nunca, ya que la baja del precio del petróleo perjudica el avance de los negocios en este ámbito.
El debate minero concluyó con las presentaciones de los proyectos de Hierro Indio y Cerro Amarillo en la legislatura provincial y ambos fueron postergados por diversas razones. El tan esperado inicio de las obras de los Blancos, parece no llegar nunca a pesar de haber vencido la amenaza que generaba la posibilidad, que por tener en principio esta obra financiamiento del BNDS de Brasil, el equipamiento hidromecánico se compre en ese país. El año 2015 presenta un escenario difícil de cara a las elecciones donde la falta de trabajo comienza a jugar un papel central en las discusiones de cara al posicionamiento de cada uno de los candidatos participantes.
En este camino desde los sectores empresarios vislumbramos alguna esperanza de cambio y el debate de la matriz productiva provincial en el caso de Mendoza comienza a ser tema de debate cotidiano. Aquí es donde entendemos que ha llegado la hora de un debate maduro, racional y con conocimiento técnico sobre el camino que debemos transitar con vistas a generar valor agregado y darle a la provincia un dinamismo mayor al actual. En este sentido la Energía y todo lo que implica el tema debe ser asumido con total responsabilidad ganando terreno en el debate público para que de una vez por todas veamos concretadas las obras que desde hace tiempo la provincia necesita. Ya hablamos de Los Blancos, pero también existe la deuda de Portezuelo del Viento, otra obra hidroeléctrica prometida por años y sin avances concretos. El trasvase de las aguas del Río Grande al Río Atuel y el desarrollo integral del sur provincial con petróleo, minería, ganadería y turismo atados al mismo tren del desarrollo, debe transformar una región empobrecida, en pujanza y nuevas oportunidades. El sector metalúrgico provincial está preparado para enfrentar los desafíos que se avecinan si estas grandes transformaciones se producen. Más de 100 años de historia nos han puesto a prueba de las capacidades existentes, aportando mano de obra calificada para la construcción de centrales hidráulicas, componentes nucleares, desarrollo petrolero y agrícola-industrial. No obstante esto nada será posible sin decisiones políticas que pongan en marcha el aparato productivo provincial. En este marco de decisiones la amenaza China sigue latente y de no generar una fuerte defensa de los intereses nacionales el avance del gigante asiático dejará sin posibilidades a nuestras pymes metalúrgicas. Por esto es que entendemos que la opción de la integración es el camino a recorrer y evitar el desmantelamiento del desarrollo tecnológico que en el campo energético es reconocido mundialmente. Estamos esperanzados en que próximamente las inversiones y los grandes proyectos se transformen en realidades. En el ámbito petrolero Vaca Muerta y las nuevas áreas, en el hidroeléctrico Los blancos y Portezuelo, en el minero hay más de 20 proyectos metalíferos que hoy podrían dar trabajo a miles de mendocinos. Es cierto que el mayor freno al inicio de estas obras es el financiamiento, pero a veces es solo una excusa para no tomar decisiones comprometedoras. Mendoza tiene Petróleo, Cobre, Uranio, Oro y otras riquezas naturales, pero seguimos con muchos mendocinos por debajo de la línea de pobreza. La falta de decisiones políticas y las sucesivas administraciones no se han animado a tomar el camino del desarrollo, la ampliación de la matriz productiva y la generación de empleo con la seriedad que estos momentos requieren.
por JULIO C. TOTERO
Presidente
ASINMET De Mendoza