La producción de de gas y petróleo no convencionales en la Cuenca Neuquina representa, respectivamente, el 32,95 % y el 12,11 % del total extraído a nivel nacional. ¿Cuáles son las claves para entender un fenómeno que vuelve a posicionar a la Argentina en el mapa energético regional e internacional?
Con una superficie de 30.000 kilómetros cuadrados, Vaca Muerta se ha convertido en una de las principales apuestas para lograr el autoabastecimiento energético y volver a posicionar a la Argentina como exportador de hidrocarburos. Sin embargo, más allá de ser la vedette de los recursos no convencionales, Vaca Muerta no es la única formación sedimentaria que, gracias a diferentes procedimientos de estimulación de sus reservorios de gas y petróleo, ha permitido revertir la caída de la producción de hidrocarburos en nuestro país. También destacan otras importantes protagonistas de este boom, como Agrio, Los Molles, Mulichinco, Tordillo, Lotena, Las Lajas, Punta Rosada y Basamento, de cuyas entrañas brotan los denominados “hidrocarburos no convencionales”.
Tal como señala el informe “El abecé de los hidrocarburos en reservorios no convencionales”, publicado en 2013 por el Instituto Argentino del Petróleo y del Gas (IAPG), se trata de “reservorios cuya porosidad, permeabilidad, mecanismo de entrampamiento y otras características difieren respecto de los reservorios tradicionales”. Como en ellos el gas y el petróleo se encuentran entrampados en rocas poco permeables y de muy baja porosidad, se requiere la aplicación de sofisticadas técnicas de estimulación hidráulica (también denominada “fractura hidráulica” o fracking) y perforación horizontal, para conseguir que el hidrocarburo fluya a la superficie. “El desarrollo de estos reservorios abre nuevos desafíos a geólogos, geofísicos e ingenieros”, advierte el IAPG, al tiempo que explica que “la heterogeneidad de estas formaciones, los grandes montos de inversión inicial requeridos y los mayores costos operativos aumentan considerablemente el desafío”.
El gran aporte de la Cuenca Neuquina
Las autoridades provinciales neuquinas han otorgado, hasta julio de este año, 28 concesiones de explotación no convencionales, en el marco del régimen promocional de este tipo de inversiones vigente desde 2013. Durante su última visita a Houston, en mayo pasado, el gobernador, Omar Gutiérrez, destacó que “las inversiones no se vuelcan tan sólo a perforar y producir, sino que ahora también hay que ampliar las plantas de tratamiento de petróleo y gas, construir nuevas plantas, nuevos oleoductos y gasoductos”.
Los resultados han sido contundentes: la producción de gas no convencional representaba en 2013 apenas el 17,9 % del total producido en Neuquén; hoy se extrae de esos reservorios el 54,05 % del gas producido en dicha cuenca. Y, en números generales, actualmente significa el 32,95 % del gas extraído en todo el país. En el caso del petróleo, la producción no convencional representaba en 2013 el 10,7 % del total neuquino, en tanto que actualmente significa el 28,26 % del total producido en dicha cuenca; y el 12,11 % del petróleo producido en todo el país (ver recuadro).
El principal desarrollo de petróleo no convencional en la Cuenca Neuquina es el área Loma Campana, con una superficie de 290 kilómetros cuadrados, cuya explotación está a cargo de YPF y de su socia Chevron. Su producción saltó de 24.382 barriles promedio por día a 30.258 barriles promedio por día, desde octubre de 2015 hasta mayo de 2018. Representa el 75 % del petróleo no convencional extraído en la cuenca, y solo es superado, en números absolutos, por el mayor yacimiento convencional del país, Anticlinal Grande-Cerro Dragón, ubicado en la cuenca del Golfo de San Jorge y explotado por Pan American Energy (PAE). Por su parte, el gas de Loma Campana también permite apuntalar la producción de energía eléctrica: en marzo pasado, a través de su subsidiaria YPF Luz (ex YPF Energía Eléctrica), la petrolera estatal y su socia General Electric inauguraron dos nuevas centrales termoeléctricas, Loma Campana I y II, que aportan un total de 210 megavatios al sistema interconectado nacional.
Otra de las grandes apuestas de YPF en la Cuenca Neuquina, en este caso en joint venture con Dow Argentina, es el bloque El Orejano, con una producción promedio superior a los 5 millones de metros cúbicos diarios. Una de las apuestas, en vistas a la “monetización” del gas allí producido, sería la expansión del polo petroquímico de Bahía Blanca, donde ya opera Dow; y, a futuro, se estaría analizando la licuefacción de parte del gas para exportar GNL (gas natural licuado) en los meses de verano, a través de ese mismo complejo portuario del sur bonaerense. Siempre con relación al gas no convencional neuquino, en los últimos meses la revelación del mercado ha sido el bloque Fortín de Piedra, operado por Tecpetrol –la petrolera del Grupo Techint–, que produce actualmente 7,4 millones de metros cúbicos diarios. Tras la inauguración, en mayo pasado, de un gasoducto que permite inyectar la producción de Fortín de Piedra al sistema troncal del país, Tecpetrol se propone alcanzar en 2019 un volumen de 16 millones de metros diarios, lo que equivaldría a alrededor del 10% de la producción total de gas del país.
Mayor competitividad, mejor conectividad y más exportaciones
Con el foco puesto en mejorar la competitividad de la industria, en enero de 2017 la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) y los sindicatos de trabajadores petroleros y del personal jerárquico de Neuquén, Río Negro y La Pampa firmaron una adenda al convenio colectivo de trabajo, orientada a optimizar las actividades de exploración y explotación de hidrocarburos no convencionales en la Cuenca Neuquina. Entre los puntos salientes, figuran: el encuadramiento de todo el personal en la modalidad de contratación “a plazo determinado”, es decir, sujeta a interrupción o cancelación con el pago de la correspondiente indemnización; la flexibilización del régimen de horas extras que afecta a los trabajadores de los yacimientos; la eliminación de las “horas taxis” –período durante el cual los trabajadores permanecían en tráileres u hoteles, a disposición de la empresa–; y la posibilidad de realizar en horario nocturno actividades de montaje, desmontaje y acondicionamiento de cargas en equipos de perforación.
Mientras tanto, una de las consecuencias de la mayor disponibilidad de gas, a partir del boom neuquino, es el reinicio de las exportaciones a Chile a partir de octubre próximo, luego de doce años de interrupción. El Ministerio de Energía de la Nación, conducido por Javier Iguacel, acaba de reglamentar el procedimiento de exportación, cuya autorización quedará supeditada a la no afectación del abastecimiento interno de gas durante todo el plazo del permiso otorgado. Mientras tanto, para mejorar la capacidad de transporte, la operadora Gas Natural Fenosa está construyendo un nuevo compresor, que permitirá ampliar la capacidad de transporte del Gasoducto del Pacífico –que une los yacimientos neuquinos con la región chilena de Biobío– de los actuales 7,5 millones a 12,5 millones de metros diarios.
Un último anuncio destinado a mejorar la logística de las operaciones en los yacimientos neuquinos es la reactivación del Tren Norpatagónico. El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, adelantó la intención del Gobierno de efectuar un llamado a licitación a través del sistema de participación público-privada (PPP). Con un plazo de ejecución de cuatro años, el objetivo consistirá en la renovación del tendido de 700 kilómetros que une el puerto de Bahía Blanca con la localidad rionegrina de Contralmirante Cordero y la construcción de 83 kilómetros adicionales de vías férreas desde allí hasta Añelo, localidad neuquina ubicada en el corazón de Vaca Muerta. “Gracias a estas obras, bajarán los costos logísticos y se reducirá la cantidad de camiones por rutas, mejorando el tránsito y disminuyendo la contaminación”, destacó el presidente de Trenes Argentinos Infraestructura, Guillermo Fiad.
Lo que está ocurriendo en materia de recursos no convencionales en Neuquén ha llevado al presidente Macri a aventurar que “en tres años seremos exportadores netos de gas, y en cuatro o cinco años exportaremos medio millón de barriles de petróleo”. Todo dependerá del avance de las inversiones, la competitividad de nuestra industria hidrocarburífera y las señales de precios en el mercado local e internacional. Los resultados conseguidos en el último lustro invitan al optimismo, ya que han vuelto a colocar a nuestro país, y a la Cuenca Neuquina en particular, en el foco de los inversores de todo el mundo.
HIDROCARBUROS NO CONVENCIONALES EN LA CUENCA NEUQUINA
¿CUÁNTO REPRESENTA EL GAS NO CONVENCIONAL?
| Producción de tight y shale gas
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Mayo 2016 | Mayo 2017 | Mayo 2018 |
| Respecto del total producido en la Cuenca Neuquina
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38,79 % |
43,89 % |
54,05 % |
| Respecto del total producido en el país | 22,38 % | 25,91 % | 32,95 % |
¿CUÁNTO REPRESENTA EL PETRÓLEO NO CONVENCIONAL?
| Producción de tight y shale oil
|
Mayo 2016 | Mayo 2017 | Mayo 2018 |
| Respecto del total producido en la Cuenca Neuquina
|
15,38 % |
21,81 % |
28,26 % |
| Respecto del total producido en el país | 6,46 % | 9,04 % | 12,11 % |
Fuente: “Reporte Mayo 2018 – Hidrocarburos no convencionales en Argentina” (HUB Energía – Universidad Austral)
